Renault y Caterham han anunciado su decisión de unir fuerzas para un proyecto común: el diseño y desarrollo de un futuro coche deportivo que partirá del mítico Renault Alpine y contará con la personalidad de los vehículos de Caterham Cars.

A través de este acuerdo Caterham Cars pasa a controlar el 50 por ciento de Automobiles Alpine Renault, que hasta la fecha pertenecía por completo a Renault SAS. En enero de 2013 se completará esta asociación, que quedará bajo la dirección de Bernad Olivier. "Estoy muy orgulloso de la confianza depositada en mí por ambas partes", ha señalado Olivier. "La ruta a seguir para cada coche es clara y simple: respetar el ADN tanto del Alpine como de Caterham Cars. Con la pasión y la experiencia del equipo dedicado a este proyecto, estamos seguros que conseguiremos el objetivo".
Este nuevo proyecto se va a llevar a la planta de Dieppe (Normandía), lo que asegura el futuro de la planta francesa, que actualmente se dedica a la construcción de vehículos diseñados por Renault Sport Technologies (de producción o de carreras).
"Esta innovadora asociación con Caterham encierra una ambición de largo recorrido: la creación de un coche deportivo con el ADN del Alpine", ha comentado Carlos Ghosn, CEO de Renault.
Los planes de futuro para Société des Automobiles Alpine Caterham son la producción de pequeñas y grandes series de coches deportivos y hacerse hueco en este mercado. Para ello, quieren lanzar el primer vehículo en los próximos tres-cuatro años. Así culmina el deseo de Renault por traer a su mítico Alpine (A110 Berlinette), que empezaba meses atrás con la presentación de un prototipo tributo partiendo del DeZir concept.
