La tecnología nos hace la vida más fácil. Cada día, la industria del automóvil nos sorprende con nuevos añadidos para nuestros vehículos que nos permiten una conducción más sencilla y segura. Sin embargo, son todos estos avances los que, a la hora de valorar un coche, pueden engañar a nuestras expectativas. Si bien es cierto que nos proporcionan asistencias muy valiosas, también se vuelven más vulnerables a ataques informáticos, y eso ha empezado a preocupar a los conductores.
Los coches son el nuevo objetivo de los hackers, que utilizan la tecnología de estos para poder abrirlos sin problemas. Según la ADAC alemana (el mayor club de automóviles del país germano), 24 modelos se han visto afectados por un fallo en la seguridad que está facilitando el trabajo a los ladrones de automóviles. Ford, Audi, BMW o Toyota, son algunas de las marcas que están sufriendo estos robos.

La lista de vehículos susceptibles se puede encontrar en la web de la ADAC. En su mayoría son coches fabricados entre 2013 y 2015; los que cuentan con los sistemas más modernos. Este agujero informático, sin duda es un reto con el que la industria tiene que ponerse de inmediato.
Para hacerse con los vehículos, los hackers trabajan en parejas. Como ha demostrado el club alemán, se acabó lo de tirar de ganzúa o romper los cristales del coche. Ahora, uno recoge la señal que envía la llave automática al coche para desbloquear las puertas y encender el motor. El otro, la recibe y la almacena, listo para utilizarla y hacerse con el automóvil cuando su dueño no esté cerca. El proceso se lleva a cabo desde una larga distancia desde donde se recoge y se envía la información de vuelta al vehículo. De nada sirven las sofisticadas alarmas, pues los ladrones usan una señal idéntica a la original que el coche identifica como la de su propia llave.
No se deja rastro, el equipo utilizado es muy barato y no hay que ser un gran experto para llevar a cabo el robo. “Durante las pruebas, los expertos fueron capaces de abrir coches a través de una red inalámbrica de construcción propia en cuestión de segundos y sin dejar pista alguna”, explica ADAC en su web.
*Imagen 2 editada de John Loo con licencia CC BY 2.0