
La Dirección General de Tráfico publicó ayer el Balance de seguridad vial 2012, un informe anual en el que se desveló que las víctimas mortales en carretera han descendido un 12 por ciento con respecto a 2011. Aún así, 1.304 personas perdieron la vida el pasado año en las vías españolas.
Desde 2000 las cifras de mortalidad en las carreteras españolas han ido descendiendo ejercicio a ejercicio. Por aquel entonces, 4.241 personas perdían la vida al volante al año, y ahora ocho años después la cifra se ha reducido un 70 por ciento. De once muertos al día doce atrás, de media, hemos pasado a 3,6 fallecidos.
Las razones para ello hay que buscarlas en la gran labor de la DGT y sus campañas, el trabajo diario de la Guardia Civil en las carreteras y algunas propuestas estatales como la implantación del carné por puntos. También es cierto que este año se han reducido los desplazamientos debido a la crisis.
En estos momentos la cifra de muertos se sitúa en números de 1960, cuando en España solo circulaban por las carreteras un millón de vehículos. Ahora, 53 años después y con 30 millones de coches más (y 24 millones de conductores más), los números han vuelto a mínimos históricos.
Por sexos, los hombres son una mayoría con el 77 por ciento de los fallecidos siendo de sexo masculino; mientras que por edades, todas los grupos descienden, menos los menores de 14 años. En el grupo de edad que más bajan las defunciones es el de 25 a 34 años.
Por comunidades autónomas, Andalucía con 221, Cataluña con 196, Castilla y León con 128, Castilla-La Mancha con 120 y Comunidad Valenciana con 115, son las que presentaron más siniestralidad al volante en 2012.
Las carreteras convencionales siguen siendo los puntos más negros de nuestra geografía vial. En 2012, 1.022 personas perdieron sus vidas en estas vías (de las 1.304 totales).

Aunque nos sorprenda, el informe de la DGT desvela que el 22 por ciento de los fallecidos en turismos no llevaban el cinturón de seguridad (41 por ciento en 2000). Y más increíble aún es que 7 de los 27 niños menores de 12 años que fallecieron circulaban sin silla infantil o cinturón.
El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, habló ayer para los medios para resaltar estas importantes noticias y agradecer la responsabilidad que tienen DGT y Guardia Civil sobre las mismas. Además, a cuenta del último informe, el ministro anunció que en primavera se va a reducir el límite máximo de velocidad en las carreteras convencionales (actualmente se puede circular a una velocidad máxima de 100 km/h).